Las autopsias virtuales en la realidad, no son pavadas de CSI

Muchos piensan que las escenas de CSI y series similares en las que sale un forense realizando una autopsia virtual eran invento de los guionistas, pero parece ser que no lo son tanto.

Al parecer, según cuentan en Virtues of the Virtual Autopsy, el uso de este tipo de técnicas se está extendiendo cada vez más, en especial en los casos en los que el fallecimiento se produce por un traumatismo derivado de un accidente, una acción de guerra, o similar.

En estos casos es muy importante, tanto para determinar la causa exacta de la muerte, como para examinar la efectividad de los sistemas de protección empleados como chalecos antibala, o como para ver la efectividad de algunos de los tratamientos aplicados, no cortar los tejidos.

Al no hacerlo se mantiene la distribución espacial de huesos rotos, balas o fragmentos de metralla, etc, y en los casos en los que una acumulación de líquido puede haber sido la causa de la muerte o influir en ella, este se queda donde estaba.

Para este tipo de autopsias se combinan imágenes de rayos x con escáneres, con resonancias magnéticas, y en algunos sistemas también con escaneos 3D de la superficie del cuerpo para obtener las imágenes que luego el forense puede estudiar milímetro a milímetro sin necesidad de tocar el cuerpo.

Aparte de las ventajas mencionadas, este tipo de técnicas también son importantes desde lo legal, ya que ayudan a preservar pruebas que de otra forma podrían perderse, y permiten esquivar problemas con las creencias religiosas de algunas personas que no permiten que se hagan autopsias.

La desventaja, por ahora, es el coste de los equipos, aunque es cierto que en muchos hospitales ya existen los equipos de rayos X y de tomografía y resonancia necesarios, por lo que sólo es necesario añadir el software y el digitalizador 3D, y sobre todo el tiempo de uso de esos equipos, que suelen tener un alto grado de ocupación con pacientes vivos.

También está el problema de que es un procedimiento caro, con lo que en muchos casos los familiares de los pacientes fallecidos o los interesados en realizar la autopsia no pueden permitírselo.

Otro problema es que aún no parecen ser tan fiables como las autopsias tradicionales para casos de fallecimiento por enfermedades degenerativas, infecciones, etc, con lo que no es probable que las autopsias virtuales lleguen a desbancar a las reales sino que acaben conviviendo.

Visto en Microsiervos